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Economia 04.01.24

Modificación en la deuda externa privada: las empresas ya no tendrán que refinanciar

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El 2 de enero de este año, perdió vigencia la normativa del Banco Central que obligaba a las empresas a reestructurar al menos al menos el 60% de sus vencimientos de deuda financiera en moneda extranjera a un plazo de dos años. Según supo Ámbito de fuentes oficiales, la conducción actual de la entidad decidió no renovar esa regulación, que se había dispuesto a través de la Comunicación “A” 7106 en septiembre de 2020 y había sido prorrogada por la “A” 7621 en octubre de 2022 hasta fines de 2023.

De esta forma, las empresas podrán acceder libremente al dólar oficial para pagar sus pasivos. La norma no renovada establecía la obligación de refinanciar del 60% del vencimiento de capital, como mínimo, a una vida promedio de dos años. Es decir que todas las empresas que tuvieran compromisos de deuda externa financiera podían acceder al mercado oficial de cambio por un monto equivalente al 40% de los mismos y rollear el resto.

Además, no podían cancelar deuda entre firmas vinculadas y tuvieron la obligación de cancelar con fondos propios del exterior. En tanto que las deudas que habían sido refinanciadas bajo esa regulación no se debían volver a rollear, por lo que en estos casos las empresas tenían acceso pleno al mercado oficial. A la vez, sí se permitía el acceso al mercado para la cancelación de capital que no superara los u$s2 millones mensuales, con el fin de no perjudicar a pequeñas y medianas empresa.

La norma se aplicó en un momento en el que la crisis de reservas del BCRA era muy fuerte y las proyecciones eran preocupantes y se decidió prorrogarla ante los efectos que se esperaban de la sequía, que hizo perder ingresos de dólares por u$s20.000 millones a la Argentina en 2023.

Eso hizo que, durante 2023 se reforzara por varias vías las restricciones de acceso al dólar a fin de controlar la salida de reservas ante ese complejo contexto. Una de esas medidas fue la que obligaba a financiar gran parte de la deuda en dólares de las empresas por fuera del mercado oficial. La decisión de no renovar esta normativa se puede leer como en una nueva flexibilización del cepo cambiario.

Qué busca el BCRA

La flexibilización se da en un contexto de recomposición de reservas por unos u$s3.000 millones desde que asumió el nuevo Gobierno y también cuando a las empresas no les es tan favorable el valor del dólar oficial en comparación con los tipos de cambios paralelos dado que la brecha se redujo mucho a partir de la devaluación del 54% que se aplicó el 13 de diciembre.

El BCRA viene logrando comprar dólares gracias a la devaluación fuerte que implementó. Sin embargo, el economista y director de MyR Consultores, Fabio Rodríguez, anticipa que “esa situación tiene mucho de transitoria y no resulta aún producto de una normalización del mercado cambiario y de los flujos de comercio exterior”.

Rodríguez señala que existe todavía un súper cepo a las importaciones a pesar del cambio de reglas, por lo que prácticamente no se ve demanda privada en el mercado. Y es que, tal como explica el economista Federico Glustein, aún no está normalizado el escenario de importaciones, por lo que muchos se siguen financiando por fuera del mercado oficial. En ese contexto, señala que el BCRA está aprovechando para comprar dólares.

“A su vez, los exportadores están adelantando ventas por el ´endulzante´ de la formula (oficial + CCL)”, señala Rodríguez. El economista explica que esto trajo una calma transitoria y baja de la brecha, pero anticipa que eso podría empezar a cambiar sobre fines de enero, preanunciando más tensiones en el mercado.

Por su parte, el economista y director de CyT Asesores Económicos, Camilo Tiscornia, opina que “se trata de una medida positiva” en pos de ir liberando el cepo cambiario. Pero, reconoce, no obstante, que esto puede impactar en la demanda de divisas, dado que, además, se combina con un momento en el que se verá una caída en la demanda de dinero tras el pico de diciembre.

“Son varios elementos que podrían ejercer presión en el tipo de cambio”, advierte. Y considera que “hay que ir viendo lo que sucede hacia adelante y si esto implica que habrá un efecto en el dólar a corto plazo”.

Ámbito Financiero